Este campo de colinas parece ser plano a simple vista, pero en realidad esconde muchos desafíos, con sus fairways excepcionalmente largos que aumentan considerablemente la dificultad general. Desde el principio, los largos fairways desafían a los golfistas, y los hoyos 8 y 13, de distancia media, tampoco deben subestimarse, ya que su longitud pone a prueba la resistencia y habilidad de cada jugador. El hoyo 6 y el hoyo 8 en los primeros nueve hoyos son considerados "obstáculos": el hoyo 6 tiene el área fuera de límites en el lado izquierdo, y un pequeño error puede hacer que la pelota quede fuera de límites; el hoyo 8, aunque es una subida suave, exige un control preciso de la potencia y el ángulo del golpe. El desafío principal de los últimos nueve hoyos radica en los hoyos de paso de agua: el hoyo 12 no solo es largo, sino que requiere cruzar un estanque, mientras que el hoyo 14 requiere cruzar el agua en dos golpes consecutivos. No es nada fácil mantener el par aquí.